¿Son los penes circuncidados y no circuncidados realmente tan diferentes? ¿Cuáles son los efectos positivos y negativos de la circuncisión? Este es un procedimiento muy común, pero ¿cómo afecta a las personas circuncidadas? Todas estas preguntas son muy comunes y estamos aquí para aclararte todo lo que quieras saber sobre la circuncisión.

Circuncisión: una descripción general del procedimiento

La circuncisión es un procedimiento quirúrgico en el que se elimina la piel que cubre la punta del pene. Este pequeño trozo de piel se llama prepucio. El prepucio es una continuación de la piel que recubre el resto del pene. En la mayoría de los casos, la circuncisión se realiza durante el primer mes de vida. Es mucho menos común que la circuncisión se realice en adultos. 

La circuncisión se realiza de manera rutinaria en ciertas religiones, particularmente en la religión judía. Para aquellos que practican la fe judía, la circuncisión generalmente se realiza al octavo día de vida. La circuncisión no es obligatoria en el Islam, pero se recomienda. El Islam no dicta una edad específica en la que se debe realizar la circuncisión.
Salud: ciertas afecciones médicas, como la fimosis (cuando el prepucio está demasiado apretado y no se puede colocar sobre la cabeza del pene), pueden requerir la circuncisión.
Higiene: Algunos padres creen que la circuncisión facilitará que sus hijos mantengan una higiene genital adecuada durante toda su vida.
Preferencia personal: Los padres pueden tomar esta decisión porque el procedimiento se ha realizado tradicionalmente en sus familias, independientemente de su religión.

Cuando la circuncisión se realiza por motivos religiosos, a veces se realiza como parte de un ritual. Los profesionales médicos recomiendan que la circuncisión se realice en un entorno médico estéril por un médico calificado.

La circuncisión es un procedimiento corto que generalmente se realiza con anestesia local o una crema anestésica, aunque la anestesia general se puede usar en niños mayores. Se pueden utilizar diferentes métodos para realizar una circuncisión. Posteriormente, se dan instrucciones para cuidar el pene hasta que esté completamente curado. Hay ciertos riesgos asociados con la circuncisión, tales como:

• Eliminación excesiva o inapropiada del prepucio
• Sangrado o infección del sitio quirúrgico
• cicatriz en el pene
• Adherencias de la piel en la punta del pene.
• Meatitis o inflamación de la abertura de la uretra
• Estenosis meatal o estrechamiento de la abertura de la uretra
• Reducción permanente de la sensibilidad en la cabeza del pene, especialmente durante las relaciones sexuales.

La mayoría de los riesgos asociados con la circuncisión son menores y pueden manejarse fácilmente. Pueden ocurrir complicaciones graves, pero son poco comunes. No se recomienda la circuncisión en pacientes con trastornos de la coagulación, ya que pueden experimentar un sangrado abundante como resultado del procedimiento. Estos riesgos deben discutirse con un médico.

Cuando un pene no circuncidado está flácido, el prepucio cubre la cabeza (glande) del pene, dándole una apariencia de “capucha”. Un pene circuncidado, por otro lado, no estará cubierto por ninguna piel. Los penes circuncidados y no circuncidados se ven muy similares cuando están erectos. Cuando un hombre no circuncidado tiene una erección, el prepucio se retrae naturalmente para exponer el glande. La piel de un pene circuncidado puede sentirse más dura que la de un pene no circuncidado.

Pene circuncidado y no circuncidado: higiene

El prepucio de un pene no circuncidado puede actuar como reservorio de bacterias, células muertas de la piel y sebo. Estos elementos pueden crear una sustancia maloliente llamada smegma. El esmegma puede provocar inflamación del pene o balanitis, que eventualmente puede causar fimosis. Sin embargo, una buena higiene genital puede prevenir estos problemas. Los adolescentes y adultos no circuncidados deben retraer el prepucio para limpiar correctamente el pene.

La edad a la que se puede retraer el prepucio varía de persona a persona. Normalmente, el prepucio no se puede retraer en niños menores de 5 años, pero debe estar completamente retraído en la pubertad. La circuncisión facilita la limpieza del pene, simplemente hay que lavarlo con regularidad. La circuncisión está relacionada con un riesgo mucho menor de desarrollar cáncer de pene, que se ha relacionado con el esmegma y la fimosis. Sin embargo, esta es una condición rara y una buena higiene también puede ayudar a reducir este riesgo.

Circuncidado y no circuncidado: diferencias de sexo

Hay mucho debate sobre si las personas circuncidadas y no circuncidadas experimentan el sexo de manera diferente. Los estudios científicos han producido resultados contradictorios. Algunos estudios han encontrado que los hombres circuncidados experimentan niveles más bajos de placer sexual. Sin embargo, estos hallazgos han sido reprendidos por otros estudios que han encontrado evidencia contradictoria.

Los profesionales de la salud generalmente coinciden en que, aunque el prepucio es una zona muy sensible, las personas circuncidadas pueden alcanzar los mismos niveles de placer y satisfacción sexual que las personas no circuncidadas. No se ha demostrado de manera concluyente que la circuncisión tenga efectos adversos sobre la función sexual. La circuncisión puede afectar la capacidad natural de lubricar el pene durante el coito y la masturbación. Sin embargo, esto se puede compensar con el uso de lubricación adicional, lo que puede mejorar el sexo para ambos miembros de la pareja.

Circuncisión: ¿afecta la fertilidad?

La circuncisión no tiene un efecto directo sobre la fertilidad del hombre. No estar circuncidado aumenta el riesgo de desarrollar fimosis o infecciones como balanitis y enfermedades de transmisión sexual. Estas condiciones pueden afectar la fertilidad masculina, pero estos riesgos también se pueden evitar con una buena higiene. Hay otros factores que pueden tener un efecto mucho más significativo en la fertilidad masculina, como la dieta, el estilo de vida, los desequilibrios hormonales, ciertos medicamentos, el conteo de espermatozoides y las condiciones de salud crónicas.

Circuncidados y no circuncidados: riesgos de infección

La circuncisión reduce el riesgo de contraer el VIH de una pareja seropositiva. El prepucio contiene células de Langerhans, que tienen más probabilidades de unirse al virus del VIH que otros tipos de células. Los hombres circuncidados también tienen un menor riesgo de contraer herpes genital y VPH.

Los bebés circuncidados tienen un menor riesgo de desarrollar una infección del tracto urinario o UTI durante el primer año de vida. Pero incluso en bebés no circuncidados, este riesgo es solo del uno por ciento.

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